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Sarah Russek
Psicoterapeuta Cognitivo Conductual
Terapia de Aceptación y Compromiso, Mindfulness y Psicología Positiva.
Psicóloga especializada en el manejo del estrés, ansiedad y depresión. Espacialista en el tratamiento de los trastornos por ansiedad y el TOC.
sentirse bien...
¿Cuán grave es tu problema?
Si te sientes abrumado o sin esperanza, la Terapia Cognitivo Conductual puede resultar enormemente últil. Se han desarrollado tratamientos nuevos y potentes en TCC para la depresión y para todos los tipos concebibles de ansiedad, tales como la preocupación crónica, la timidez, la ansiedad para hablar en público, la ansiedad para los exámenes, las fobias y los ataques de pánico.
La ansiedad adopta muchas formas distitas...
Ve si te reconoces en alguna de las siguientes pautas:
Preocupación cronica: te preocupas constantemente por tu familia, tu salud, tu carrera profesional o tu economía. Se te revuelve el estómago y tienes la impresión de que está a punto de pasarte algo malo, aunque no eres capaz de determinar cuál es el problema.
Miedos y fobias: Puedes tener miedo a las agujas, a la sangre, a las alturas, a los elevadores, a conducir, a viajar en avión, al agua, a las arañas, a las serpientes, a los perros, a las tormentas, a los puentes, a quedarse atrapado en lugares cerrados. ¡A lo que sea!
Ansiedad por el desempeño: te quedas paralizado al hacer un exámen, actuar o hacer algo frente a otras personas te altera al grado de afectar tu actuación. Al competir en lo que sea o en una prueba deportiva no fluyes como quisieras.
Timidez: Te sientes nervioso y apurado en las reuniones sociales, porque te dices a ti mismo: "todo el mundo parece encantador y relajado", "se me nota nervioso y torpe", "yo no tengo nada interesante que decir", "se van a dar cuenta de mi timidez y de lo fuera de lugar que me siento", "han de pensar que soy un inadaptado o fracasado","soy el único que se siente asi", "¿qué me pasa?".
Ataques de pánico: Sientes un miedo intenso, repentino, que pareciera como si viniera de la nada, inesperadamente. En el ataque te sientes mareado, con taquicardia, con el pecho comprimido, con hormigueos. Quizá pienses "¡me estoy muriendo por un ataque al corazón!", "¿ y si me desmayo o me muero?", "No puedo respirar", ¿Y si me ahogo?". Todo para que al poco rato el pánico desaparezca como llegó, dejándote avergonzado y humillado; y con la duda de "¿cuándo me volveá a suceder?"
Agorafobia: Tienes miedo a salir de tu casa o a estar en espacios públicos o abiertos, por miedo a que algo terrible pase, en especial temes otro ataque de pánico, con el miedo adicional de que nadie pueda ayudarte.
Obsesiones y compulsiones: Te acosan pensamientos obsesivos, que rechazas, que te atemorizan o averguenzan, pero que no puedes parar de pensar en ellos. También tienes impulsos compulsivos, rituales supersticiosos o revisiones que no puedes dejar de hacer por más absurdos que sean. en un intento de controlar tus miedos, pero que te dejan exausto o te hacen pasar verguenza.
Trastorno de Estrés Postaumático: Te acosan las imágenes o los recuerdos de algún suceso terrible. Aunque pudo haber pasado hace meses o años.
Retoma el control de tu estado de ánimo:
- Aprende cómo puedes cambiar tus pensamientos angustiosos y todos aquellos que contribuyen a engrandecer tus problemas.
- Aprende a identificar y modular tus emociones.
- Resuelve problemas y toma acciónes que mejoren tu vida y tus relaciones.
-Practica habilidades que te permitan manejar adecuadamente tus preocupaciones.
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